Editorial: Ante la amenaza de la censura, votar con cultura

La democracia que se inició en España con la Constitución de 1978 se ha conformado, con sus fallas procesales y su imperiosa necesidad de reinventarse, como el mejor medio para garantizar la consecución de derechos y libertades, un camino que aún seguimos recorriendo, para todos los colectivos y ciudadanos que convivimos en nuestro país. Sin embargo, en las últimas semanas estamos siendo testigos de una inquietante tendencia que amenaza los pilares fundamentales de nuestra sociedad plural: las administraciones públicas que censuran obras artísticas por estar fuera de su pensamiento único.

La censura es solo el primer paso dentro del programa arrollador de las ultraderechas en nuestro país, que pretenden derribar todos los avances sociales conseguidos hasta la fecha e imponer su visión centralizada, religiosa y nostálgica de regímenes anteriores. Desde Cooltura Lanzarote queremos alzar nuestra voz y expresar nuestra preocupación por este fenómeno que ha ido en aumento debido al auge del radicalismo nacionalista y con la connivencia de partidos supuestamente democráticos.

Nos encontramos ahora ante un escenario en el que el miedo y la intolerancia se imponen, en muchos puntos de nuestro país, sobre la apertura y el diálogo. La censura cultural se presenta como una sombra oscura que se extiende, amenazando la libertad de expresión y el intercambio de ideas, que son pilares esenciales de cualquier sociedad democrática. Las expresiones artísticas, los debates intelectuales —también los electorales, aunque muchos candidatos decidan que es mejor callar que dar la cara—, la diversidad de perspectivas y la crítica constructiva son elementos vitales para el crecimiento y el desarrollo de una sociedad vibrante, plural y en constante evolución.

La censura cultural no solo limita la libertad de los artistas y creadores, sino que también afecta a toda la sociedad. Cuando se cercena el derecho a la libre expresión, se restringe nuestra capacidad de reflexionar, debatir y aprender. Se silencian las voces disidentes y se empobrece el panorama cultural, dejando a un lado la riqueza y la variedad que nos enriquecen como sociedad. En Cooltura Lanzarote creemos firmemente en la libertad de expresión, de información y en el poder transformador del arte y la cultura. Creemos que debemos levantarnos en contra de la censura e impedir que la intolerancia gane terreno. Es fundamental que, como ciudadanos y ciudadanas comprometidos con los valores democráticos, alzamos la voz en defensa de la diversidad cultural y el libre intercambio de ideas, y actuemos en consecuencia en las próximas Elecciones Generales del 23 de julio.

Las ultraderechas han encontrado terreno fértil para difundir su mensaje de exclusión y retroceso en todos los ámbitos, también en el cultural. La estrechez de miras con la que observan la realidad, la limitada capacidad de analizarla sin salirse de sus prejuicios y miedos, ha logrado calar y obtener una representación pública que, gracias a la connivencia de partidos históricos y “demócratas” y a su necesidad de ostentar sillones, les ha dado poder para lanzar ataques injustificados contra obras de arte, exposiciones, libros, películas y otras manifestaciones culturales. El ansia de poder les ha llevado a dejarse arrastrar por los discursos y las acciones de aquellos que intentan imponer su visión única y uniforme de la realidad. Esta complicidad supone un ataque mortífero a la diversidad cultural y a los derechos fundamentales que tanto nos ha costado conquistar.

Nuestro compromiso como medio cultural es dar voz a aquellos artistas y creadores que se enfrentan a la censura y el acoso. Continuaremos ofreciendo una plataforma para el diálogo y la expresión artística sin miedo a represalias. Promoveremos el respeto a la pluralidad de visiones y la necesidad de proteger la libertad creativa en todas sus formas. Enfrentar esta censura cultural requiere el esfuerzo de todos: debemos gritar en voz alta para frenar este peligroso embate contra la libertad de expresión y la diversidad cultural. No podemos permitir que el miedo y la intolerancia se apoderen de nuestra sociedad. El primer paso para luchar contra este inicio de germen dictatorial es votar con conocimiento y conciencia en las próximas elecciones generales de nuestro país.