Barrios Orquestados ofrece formación musical gratuita a todos los niños y niñas de Canarias
Barrios Orquestados arranca este curso la campaña de inscripciones de nuevo alumnado en Canarias. El proyecto social ofrece formación musical 100% gratuita a menores de 18 años y a sus familias en Gran Canaria, Tenerife, Lanzarote y Fuerteventura. Su objetivo es mejorar el tejido comunitario y fomentar el acceso a la cultura en aquellos entornos marcados por la vulnerabilidad socioeconómica y una oferta artística muchas veces limitada.
Las inscripciones permanecen abiertas desde principios de septiembre y se puede solicitar información a través del correo de contacto barriosorquestados@gmail.com. La participación en el proyecto es completamente gratuita e incluye el préstamo del instrumento. Las vacantes están destinadas a todos los niños, niñas y adolescentes que deseen formar parte de un coro, o también tocar un instrumento con una metodología singular: clases siempre en grupo, sin partituras, tocando desde el primer día y con la participación directa de las familias.
Las plazas ofertadas son para aprender violín, viola, violonchelo y contrabajo en las cuatro islas, además de, específicamente en Gran Canaria, flauta travesera, clarinete, saxofón y fagot. También sus coros infantiles y juveniles tienen las puertas abiertas para recibir nuevas voces que quieran sumarse a los grupos que ya existen.
Desde hace 12 años, Barrios Orquestados desarrolla una actividad de dinamización social y cultural sin precedentes en Canarias. A día de hoy suma 14 sedes: en Gran Canaria cubre las áreas de Tamaraceite, Guanarteme, Risco de San Nicolás, Cono Sur, Ciudad Alta, Jinámar, Montaña Los Vélez y La Isleta; en Tenerife abarca a La Cuesta, Ofra, Añaza y Barranco Grande; la tercera isla es Lanzarote, con los núcleos de Argana y Altavista, y la más reciente es Fuerteventura, con dos agrupaciones en El Matorral y El Charco.
Tras su fundación en 2011 a cargo de José Brito y Laura Brito, Barrios Orquestados sigue creciendo en Canarias para hacer de la música una herramienta de inclusión y desarrollo comunitario. Tal es el éxito de su metodología, que ha cruzado el Atlántico hasta crear una nueva sede en Chile y dos en Honduras.