La Casa Amarilla alberga la parte más medioambiental de la exposición 100 años: Lanzarote y César
Las actos de celebración del centenario del universal César Manrique siguen enriqueciendo la oferta cultural de Lanzarote para reconocer y poner en valor los últimos cien años de la evolución de la isla. Desde este 17 de abril se puede visitar en La Casa Amarilla, situada en Arrecife, la segunda exposición dentro de la serie 100 años: Lanzarote y César, comisariada por Juan Gopar y Alejandro Krawietz.
La primera parte de este conjunto expositivo, inaugurada el pasado marzo en el CIC El Almacén, se centra en las referencias que tuvo el propio César Manrique a la hora de conformarse su idea de isla. Manuel Padorno, Agustín Espinosa o Rafael Arozarena, entre otros. Juan Gopar afirma que en ella encontramos “a César y la tradición, a César y la cultura”.
Por su parte, la exposición inaugurada hoy tiene un cariz más medioambientalista. Gopar explicó que da “un salto al presente para hacer hincapié en esas cosas que pasan inadvertidas en nuestra vida cotidiana, pero que son fundamentales”. Una de las piezas expuestas lleva por nombre Infraordinario y este título le sirvió a Juan Gopar para simbolizar uno de los objetivos de la exhibición: “Hay personas que todos los días hacen un trabajo para que la vida continúe y en esta exposición encontramos el trabajo de muchas personas que son imprescindibles para entender el Lanzarote de hoy”.
Por su parte, Alejandro Krawietz conectó las dos partes de 100 años: Lanzarote y César a través del verso de Padorno “Hermoso taller el mío: mi isla”. En la exposición de La Casa Amarilla se muestra la idea de que Lanzarote es un taller para trabajar en él. Krawietz cree que “Lanzarote es un espacio de investigación, es un laboratorio y lo que hemos querido es traer dentro de La Casa Amarilla a personas que están trabajando en la isla y al mismo tiempo construyendo Lanzarote con su trabajo diario”.
La exposición también desvela un secreto. La imagen elegida para ilustrar la cartelería de la exposición corresponde a un alga valonia. Alejandro Krawietz explicó el porqué. “Este alga que habita el Charco de San Ginés realiza un trabajo de filtrado del agua; y este filtrado depende de la capacidad de la valonia para trabajar en equipo, es la única forma de que las aguas mejoren”.
La valonia es la metáfora del objetivo de la exposición que, por tanto, recoge el arduo trabajo medioambientalista que se está llevando a cabo en paralelo en Lanzarote en la actualidad a través de una nueva forma de trabajo en equipo.
La muestra, que permanecerá hasta octubre en La Casa Amarilla, situada en Arrecife, puede visitarse de lunes a viernes de 10:00 a 20:00 horas. Y los sábados de 10:00 a 14:00 horas.