Un grupo de investigadores ven la luz al final del túnel (de la Atlántida)
El túnel de la Atlántida es la parte sumergida del tubo volcánico creado por la erupción del Volcán de La Corona. Es considerado el mayor de su categoría con sus 1600 metros de largo y sus 64 de profundidad.
Ahora un equipo de la UNED ha logrado llegar al final del túnel 32 años después de que se lograse por última vez. Esta es la tercera vez que se logra tal hazaña a lo largo de la historia.
Desde la UNED, sus investigadores explican que “se trata de uno de los lugares de mayor interés geológico del Geoparque de Lanzarote y Archipiélago Chinijo, tanto por su significado geológico como por la diversidad única que vive dentro del mismo”, apuntan desde la universidad.
Complejidad técnica
Debido a la dificultad que requerían las inmersiones solo dos equipos de trabajo habían logrado realizar esta labor hasta ahora. En concreto, un grupo de investigadores franco-belga que alcanzó la cota en 1986 y los submarinistas madrileños STD, que lo hicieron en 1987.
El equipo dirigido por el catedrático de Geodinámica de la UNED Javier Lario Gómez además ha conseguido “recoger muestras geológicas del final del túnel y documentar otras en las galerías del túnel para comenzar a elaborar el que será el primer estudio geológico de la zona”.
Estas investigaciones ayudarán a mejora el conocimiento de uno de los ecosistemas anquialinos (los jameos son un ejemplo significativo de ellos) más diverso del mundo -con 36 especies endémicas. El Túnel de la Atlántida se formó hace aproximadamente 20.000 años y se fue sumergiendo con la subida del nivel del mar.